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domingo, 11 de mayo de 2014

Cuando la danza oriental se convierte en un negocio: Huyeeee

Toda profesora de lo que sea ,alguna vez ha sido alumna. Y yo también iba a mis clases de danza oriental. Qué contenta iba a mi danza, y de aquella época aprendí no sólo a bailar ,sino cómo no  debian ser las clases.
Pasé por diferentes escuelas y maestros y aunque en aquella época apenas había,ya comenzaban a surgir las primeras macroescuelas,donde la alumna era tratada como un monedero andante, no sólo se pagaban las clases, también te dejabas un dineral en velos, pañuelos de monedas, música,videos,el vestuario para los festivales de fin de curso...Aaaaaah y llegaba el verano y debías hacer los intensivos para no perder comba. En fin, una secta peligrosa no podría abducirte con más malas artes.
Si te ibas no pasaba nada, ya vendría otra "incauta"a ocupar tu puesto.
Afortunadamente hay estupendos profesores o profesoras que se interesarán realmente en tí y tu progreso que te verán como una persona y no como un cajero automático y
 no sentirás que te toman el pelo.Sinceramente,creo que las macro escuelas vistas exclusivamente como un negocio tienen sus días contados.
¿Y tú, conoces alguna escuela "sacacuartos"?

Marisa Argüelles
www.fiestasorientales.com
tel: 654700193-91319248

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